Creo que una parte de la población, especialmente la más joven, tiene un serio problema con los selfies. No se trata de criticar el cambio de hábitos que conlleva la brecha generacional, es que hay personas que tienen cientos y cientos de fotos de simplemente su cara. Haciendo morritos, sacando la lengua, levantando las cejas, cualquier morisqueta es buena para hacerse una foto.
Los padres de generaciones anteriores tuvieron que lidiar con el Rock and Roll, la ropa rota, los pelos de punta, las minifaldas, los tatuajes, las videoconsolas, pero todas esas tendencias aunque mal vistas en su tiempo llegaron para enriquecer la variedad social, divertir y culturizar. Pero pegarse el día haciéndose fotos a uno mismo con cara de gilipollas no creo que deje nada bueno para el futuro. En el baño, en un concierto, comiendo en un McDonald's, tumbado en el sofá, en el coche, en los probadores de una tienda de ropa, cualquier sitio es bueno para perder neuronas.
No creo que este comportamiento sea simple vanalidad o narcisismo indefenso. Estamos ante el reflejo de muchos jóvenes a problemas más importantes y profundos. Para muchos chavales se ha convertido en un trastorno obsesivo, algo que necesitan hacer a diario varias veces. Esa forma de mostrar tu cara en las redes sociales para que la gente les vea a todas horas del día es como gritar "eh! estoy aquí, feliz, triste, cansado, comiendo, recién levantado, da igual, lo importante es que estoy aquí y estoy sintiendo cosas".
El estilo de vida actual ha "rejuvenecido" enfermedades que antes eran exclusivas de los adultos, como el colesterol, la artrosis, diversas adicciones, y lamentablemente también lo ha hecho con las enfermedades y problemas mentales, cada vez es más común el estrés o la depresión en edades muy tempranas. Mi pensamiento no tiene ninguna base científica, al menos que yo conozca, pero no hay que ser un premio Nobel para darse cuenta que las obsesiones no son buenas. No me refiero al simple hecho de hacerse un selfie con amigos, visitando una ciudad o en un momento de diversión, quiero que quede claro, hablo de personas que tienen sus tarjetas de memoria completamente llenas con fotos de ellos mismos unido al uso que hacen de las redes sociales mostrándose al mundo a toda costa.